En la era de la inteligencia artificial y el aprendizaje automático, existe una creencia común de que los algoritmos de machine learning pueden aprender por sí solos. Sin embargo, el proceso es mucho más complejo y técnico de lo que a menudo se presenta. Este artículo explora a fondo cómo funcionan estos algoritmos, desde la calidad de los datos hasta la evaluación de su desempeño y la necesidad de recalibración.

En un mundo cada vez más impulsado por la inteligencia artificial y el aprendizaje automático, es común encontrarse con afirmaciones que sugieren que los algoritmos de machine learning pueden «aprender por sí solos» o que son capaces de mejorar su rendimiento de manera autónoma con el tiempo. Aunque esto suena fascinante, la realidad es un poco más complicada. Vamos a desmitificaremos el proceso detrás del aprendizaje automático y explicaremos por qué los algoritmos no «aprenden» en el sentido tradicional, sino que dependen en gran medida de la calidad de los datos y la toma de decisiones técnicas.
Calidad de datos: El primer paso fundamental
Antes de que cualquier algoritmo de machine learning pueda comenzar a aprender, se necesita una preparación minuciosa de los datos. Los datos utilizados para entrenar un algoritmo deben estar limpios, estructurados y ser representativos del problema que se intenta resolver. En la mayoría de los proyectos, los datos a menudo están desordenados y pueden contener errores, valores faltantes o inconsistentes. El proceso de limpieza y estandarización de datos puede ser tedioso y consumir la mayor parte del tiempo de un proyecto de análisis de datos. Un científico de datos experimentado suele invertir un tiempo significativo en esta etapa.
Separación en conjuntos de entrenamiento y prueba
Una vez que los datos están listos, se dividen en dos conjuntos distintos: entrenamiento y prueba. El conjunto de entrenamiento se utiliza para enseñar al algoritmo patrones y relaciones en los datos. El conjunto de prueba se utiliza para evaluar su desempeño. La elección de la métrica para evaluar el rendimiento del algoritmo depende de la naturaleza del problema: regresión o clasificación. Un error común es pensar que los algoritmos de machine learning simplemente «memorizan» los datos de entrenamiento. En realidad, lo que hacen es aprender patrones y relaciones en los datos para hacer predicciones en nuevos datos que nunca antes han visto.
Elección de algoritmos
En el mundo del machine learning, hay una variedad de algoritmos disponibles para abordar diferentes tipos de problemas. Para problemas de clasificación, algunos de los algoritmos comunes incluyen regresión logística, árboles de decisión, bosques aleatorios y redes neuronales, entre otros. Para problemas de regresión, se pueden utilizar algoritmos como la regresión lineal. La elección del algoritmo adecuado depende del problema que se esté abordando y requiere un conocimiento sólido de las características y limitaciones de cada algoritmo.
Evaluación del desempeño
La evaluación del desempeño es una parte crucial del proceso. La métrica más utilizada es la precisión (accuracy) en problemas de clasificación. Sin embargo, la elección de la métrica también puede depender de las implicaciones prácticas del problema. En el caso de aplicaciones médicas, minimizar los «falsos negativos» (pacientes con enfermedad no diagnosticados) puede ser tan importante como maximizar la precisión global. La evaluación del desempeño se realiza utilizando el conjunto de prueba y ayuda a determinar qué algoritmo es el más adecuado para el problema en cuestión.
Recalibración del modelo y aprendizaje continuo
Un aspecto importante que a menudo se pasa por alto es que el aprendizaje automático no es un proceso estático. Los modelos de machine learning pueden beneficiarse de la recalibración. Después de cierto tiempo, es necesario volver a evaluar el modelo y, si es necesario, ajustarlo o cambiarlo. A medida que se recopilan nuevos datos, el modelo puede mejorar su rendimiento. Esto es esencial en aplicaciones en evolución, como la atención médica, donde la tecnología de diagnóstico debe ser precisa en todo momento.
Finalmente, aunque los algoritmos de machine learning son herramientas poderosas, no «aprenden» de la misma manera que los seres humanos. En cambio, su capacidad para tomar decisiones precisas y automatizar tareas se basa en la calidad de los datos, la elección de algoritmos adecuados y la evaluación rigurosa del desempeño. El aprendizaje automático es un campo en constante evolución que requiere una comprensión profunda y un enfoque técnico. La desmitificación de este proceso es esencial para comprender y aprovechar plenamente las ventajas que ofrece en la resolución de problemas complejos en diversas áreas.
En Road To Data convetimos tus datos en información valiosa para tu negocio, confía en nosotros, expertos en Business Intelligence y Analítica Avanzada desde 2018.